miércoles, 23 de noviembre de 2011

Silencios


Gloria Swanson (Nickolas Muray, 1925)




Camel Cigarettes, Girl in pool (Nickolas Muray, 1936)

 " Rabelais se escapaba de las cárceles eclesiásticas, medievales,por medio  de la risa, de una fantasía gozosa, trepidante, vociferante. Montaigne, a través de la respiración discreta, benévola, burlona. La desaforada risa de Ravelais se transforma en Montaigne en sonrisa"(J.Edwards:La muerte de Montaigne)


 El libro de L se escribe en la convergencia de silencios y trufado está de ellos. Llegan a sus páginas los silencios cómodos y los incómodos; también la difracción del  silencio vergonzoso en la atmósfera del vergonzante (propio de traiciones). Silencios de cine mudo y de Ofelia en el arroyo llegan como ecos en la noche sin lluvia. Tensa espera del hielo en el  rayo solar del anticiclón. 

El anticiclón es todo él silencio. Es silencio hablar del tiempo.

 El silencio místico se cuece en la misma olla que el de los idiotas. No hay sabiduría en el silencio pero sí sentimiento que apagándose por forzamiento y tortura nos conduce a un estado como antidepresivo (el anticiclón es una atmósfera cargada de antidepresivos). 

El anticiclón es todo -todo silencio. Comenzar a hablar, hablar del tiempo.

(me)Duele más el silencio de los otros. La negativa a la explicación, el giro de mirada en el momento oportuno (o inoportuno). Pregunto por qué y el anticiclón es la respuesta. Quiero descifrar el secreto de mi karma (bicéfalo).  Por qué  es pregunta que araña el alma en el plano de los sentimientos más ñoños y en el espacio abierto de la metafísica. El silencio no es respuesta para la metafísica  que siempre accede al discurso si no cabe el diálogo. La metafísica habla en torno al  porqué que contesta en silencio.

 Silencio animal habita poéticamente en el libro de L.

Silencio de Gloria Swanson forzando el gesto: hieratismo egipciaco del primer star system. Construye  con naturalidad de diva una cenefa de carne que envuelve el silencio excitante de los ojos ebrios de nada y la boca reducida a un trazo.Lacería geométrica.  Nada más sano que su enfermizo silencio.

 Silencio de Ofelia fumadora - qué buena imagen para los paquetes de cigarrillos: la muerta feliz, la suicida sonriente por echar un último pitillo, abandonando casi la tercera dimensión para unirse al grupo bidimensional, el plano de todos los silencios que habitan en la cartografía oculta del libro de L.

 El libro de L es dolor y sonrisa. Acoge todos los silencios para cuando llegue el ataque de la verborrea.

1 comentario:

 Río Saja Si de la escritura restara   todas las mierdas de mi vida, la queja y la decepción frente al destino, el maldito yo en su aspect...