viernes, 25 de julio de 2014

la mirada



















Rembrandt: Muchacha en la ventana (1645)                                                            J.M.W Turner: Jessica(1830)


Helen Levitt: Nueva York (¿?)




Eli Lottar y Germain Krull: Sin título (1930)


Mirar, solo mirar me dejas y con eso
me conformo

desde la ventana, en la ventana, a través de los dedos y en los dedos
mirar los dedos como celosía que encuadra
la mano abriendo de par en par el rostro


tú lejos a mil correos de distancia

mirar en la ventana expuesto
visum et repertum

nos miran por miles en la sucesión de los siglos de los siglos

mirar para cerrar los ojos en un beso que se anticipa




Anna Malagrida: Boulevard Sébastopol 2008

Ellas miran; yo miro....

Mirar a través del aire y ver el aire, la lente, el espejo, la pintura. Lo interpuesto en su grosor y dureza. Mirar el cristal que sabemos que no por más limpio mostrará  mejor aquello que oculta

afuera del reflejo
un rostro trata de enfocar la mirada
 (no de limpiarla).

Caigo en la trampa.

Ser es ser el valor de una mirada

serás consciente de que es la tuya
 enamorada en un cruce

de miradas


( Madrid, julio 2010; Burgos julio de 2014)

martes, 15 de julio de 2014

sin título (hueco)


Jorge Oteiza: Caja metafísica (1958)

Soy sacrificio que arde en tu alabanza
(Diego de Silva y Mendoza).

"Abrir la esfera es corregir su ceguera"
(Jorge Oteiza)

escritas en clave de gramática universal
- Amor, Deber, Transparencia, Superación, Blowjob, Gol -
mis heridas se despiertan aullando
el concepto morboso
la metamorfosis de mi llaga en estigma
clave mesiánica
piedra Rosetta
código Hammurabi
playboy´s house
líder de los pueblos bosquimanos
campeón del mundo de balompié

no
no quiero desgarros connotados
                                              nada quiero nada

no quiero ser ni verlos
ni de lejos me pintaran sus sombras
ni a modo de experimento transgénico quiero
ser arcano mensaje de estrella redentora
ni Ziggy Stardus
ni  suicidado común por amor a los hombres
Cristo o Artaud
esperando hora en una cama letra
minúscula de hospital en la escritura
                                                nada quiero nada

nada mil veces no quiero
ni la falta ortográfica de las palabras
ni el cianuro
desgarrando la caja metafísica
tocata y fuga de nada
busca y captura de una oquedad
recortando con  tijeras químicas
neurotransmisores dañados ,
corrosión postindustrial del alma
apatía
o lo que sea que produzca quimeras
y tontunas
y traiciones
y sandeces
y geometría
de la nada mil veces dicha
                                         nada quiero, de lo vuestro, nada






Oteiza: Desocupación de la esfera(1958)

niego que mis heridas se conviertan en estigmas
(tod@s para el Cristo)

yo soy el regocijo
la disolución y el espejismo
rasgado de la gran pantalla
la conciencia en la sala de torturas


 Bicéfala Producciones (2010-2014)

sábado, 12 de julio de 2014

animales



soy
el espectro de un perro pastor

recorro el perímetro suspendido en las flores
volando gentil sin paraguas bajo la cartografía de la sombra margarita
sombra rosa marypoppins
y sombra petunia
ejércitos de sombras florales que tejen con misiles SAM
la huella de lo que un día fue casa
apenas hoy rectángulo de polvo decolorado
en la pared
mutando mi animalidad en el reino de la fronda



papeles certifican
ladeando la colina

mi presencia
amarilla en la nieve






soy
el espectro del mono expresionista
  - qué colores tan bien traídos -
y escapar quisiera de las sombras florales
como Leopardi mutaba el tedio:
con ingenio
gracia
y un poquito de elegante trascendencia


 (Imágenes: Franz Marc)


martes, 8 de julio de 2014

animal sin complejos y con pinta de gallo se lanza a la piscina provocando a todos aquellos que no se atreven a hacerlo por miedo a perder los rizos

Tres mil cuatrocientos veintinueve kilómetros
 un verso alejandrino si nos da por olvidar
la siempre muy espinosa cuestión esdrújula
suma silábica llegando a tu pálida piel
como quien recorre mil provincias extranjeras


solo si olvidamos juntos la manía
podría llegar esta misma tarde a la playa con ímpetu de colono
o poeta llamado Kavafis
para hablar de algo
no sé
la camisa entreabierta
el atardecer
la camisa entreabierta
la noche
la camisa entreabierta
el amanecer
la camisa entreabierta
la presencia de charcos
en los que se refleja 
la camisa entreabierta

la palabra que gime sonrojos



podemos hablar del tiempo

podemos hablar sin idiomas



podemos sentenciar que hay playas más cercanas,
tengo, es solo ejemplo,  un té reposando
sin sentido a escasos ocho metros

 el té es  playa derramado en la mesa

 todo lo tinta

una playa de color rojo para despertar a la tarde


tres
     mil
         cuatro
                   cientos
                            veinte y
                                        nueve
                                                   kiló-
                                                          metros
                                                                    más
                                                                    allá
                                                                     de
                                                                     el
                                                                     sueño
                                                                la
                                                    camisa
                                            entre
                                abierta


*******


así que me beberé el té y saldré a dar un paseo

simularé ser una joven poeta que se llame Laia o Lol
y seduciré a un marinero politatuado
que me lleve de polizón en su bragueta
o me convierta en delfín azul
todo para llegar al oriente


quiero que mañana encuentres entre las rocas
mientras buceas
a este hombre sin señas

lunes, 7 de julio de 2014

que fue como un regalo lo saben aquellos que miraron y, de lejos, sintieron lástima por un pobre y desorientado bicéfalo

Llamado por los malos poetas (Fogwill, 2002)

Se necesitan malos poetas.
Buenas personas, pero poetas 
malos. Dos, cien, mil malos poetas 
se necesitan más para que estallen 
las diez mil flores del poema. 

Que en ellos viva la poesía, 
la innecesaria, la fútil, la sutil 
poesía imprescindible. O la in- 
versa: la poesía necesaria, 
la prescindible para vivir. 

Que florezcan diez maos en el pantano 
y en la barranca un Ele, un Juan, 
un Gelman como elefante entero de cristal roto, 
o un Rojas roto, mendigando 
a la Reina de España. 

(Ahora España 
ha vuelto a ser un reino y tiene Reina, 
y Rey del reino. España es un tablero 
de alfiles politizados y peones 
recién comidos: a la derecha, negros, paralizados, fuera del juego). 

Y aquí hay torres de goma, alfiles 
politizados y damas policiales 
vigilando la casa. 

A la caza del hombre, 
por hambre, corren todos, saltan 
de la cuadrícula y son comidos. 

Todo eso abunda: faltan los poetas, 
los mil, los diez mil malos, cada uno 
armado con su libro de mierda. Faltan, 
sus ensayitos y sus novela en preparación. 
Ah.. y los curricola, 
y sus diez mil applys nos faltan. 


No es la muerte del hombre, es una gran ausencia
humana de malos poetas. Que florezcan
cien millones de tentativas abortadas,
relecturas, incordios,
folios de cartulina, ilustraciones
de gente amiga, cenas
con gente amiga, exégesis, escolios,
tiempo perdido como todo.

Se necesitan poetas gay, poetas
lesbianas, poetas
consagrados a la cuestión del género,
poetas que canten al hambre, al hombre,
al nombre de su barrio, al arte y a la industria,
a la estabilidad de las instituciones,
a la mancha de ozono, al agujero
de la revolución, al tajo agrio
de las mujeres, al latido
inaudible del pentium y a la guerra
entendida como continuidad de la política,
del comercio,
del ocio de escribir.

Se necesitan Betos, Titos, Carlos
que escriban poemas. Alejandras y Marthas
que escriban. Nombres para poetas,
anagramas, seudónimos y contraseñas
para el chat room del verso se necesitan.

Una poesía aquí del cirujeo en la veredas.
Una poesía aquí de la mendicidad en las instituciones.
Una poesía de los salones de lectura de versos.

Una poesía por las calles (venid a ver
los versos por las calles...)

Una poesía cosmopolita (subid a ver
los versos por la web...).

Una poesía del amor aggiornado (bajad a ver
poesía en el pesebre del amor...)

Una poesía explosiva: etarra, ética,
poéticamente equivocada.

En los papeles, en los canales
culturales de cable, en las pantallas
y en los monitores, en las antologías y en revistas
y en libros y en emisiones clandestinas
de frecuencia modulada se buscan
poetas y más malos poetas:
grandes poetas celebrados pequeños,
poetas notorios, plumas iluminadas,
hombres nimios, miméticos,
deteriorados por el alcohol,
descerebrados por la droga,
hipnotizados por el sexo
idiotizados por el rock,
odiados, amados por la gente aquí.

En las habitaciones se buscan.
En un bar, en los flippers,
en los minutos de descanso de la oficina,
entre dos clases de gramática,
en clase media, en barrios
vigilados se buscan.

¿Habrá en la tropa?
¿En los balnearios, en los baños
públicos que han comenzado a construir?
¿En los certámenes de versos?
¿En los torneos de minifútbol?
¿Bajo el sol quieto?
¿A solas con su lengua?
¿A solas con una idea repetitiva?
¿Con gente?
¿Sin amor?

No es el fin de la historia, es
el comienzo de la histeria lingual.

Todo comienza y nace de una necesidad fraguada en la lengua.
Falsifiquemos el deseo:
Te necesito nene.
Para empezar te necesito.
Para necesitar, te pido
ese minuto de poesía que necesito, necio:
quisiera ver si me devuelves el ritmo de un mal poema,
que me acarices con sus ripios,
que me turbes la mente con otra idea banal,
y que me bañes todo con la trivialidad del medio.

Y en medio del camino, en el comienzo
de la comedia terrenal, quiero vivir
la necedad y la necesidad
de un sentimiento falso.

Se necesitan nuevos sentimientos,
nuevos pensamientos imbéciles, nuevas
propuestas para el cambio, causas
para temer, para tener,
aquí en el sur.

Y arriba España es un panal
de hormigas orientales:
rumanas, tunecinos,
suecas a la sombra de un Rey.

Riámonos del Rey.
De su fealdad.
De su fatalidad.
De Su Graciosa Realidad.
La realidad es un ensueño compartido.
La realidad de España
es su filosa lengua pronunciando la eñe
y su mojada espada pronunciando el orden
del capital y la sintaxis.

¡Ay, lengua:
aparta de mí este cuerno de la prosperidad clavado en tu ingle,
suturada de chips, y cubre
nuestras heridas con el bálsamo de los malos poemas..!

viernes, 4 de julio de 2014

animal


Paul Klee. En el desierto (1914)



Soy un animal inquieto.

Alguien pretende convertirme en sismógrafo para sacar utilidad a mi tara. Los animales inquietos se dice que son capaces de prever, presentir, predecir. Orientan a todos menos a ellos mismos. Los animales inquietos anuncian apocalipsis y se dejan atrapar por la lava de los volcanes.

Yo soy un animal inquieto de los que fallan en sus pronósticos.

Si fuésemos todos sinceros podríamos decir que solo nos define la alteración y que esta no anuncia nada y se sorprende, como la parsimonia de otros,  cuando algo se rompe con mucho ruido.


*****


 El animal inquieto que soy se esmera en la inquietud. Necesitaría aumentar su dosis de barbitúricos o fumar un joint más cargado o pedir a sus compañeros de trinchera las chutas de morfina. Porque está bien cuando vive adormecido aunque ni adormecido deje de estar inquieto.


*****

El animal inquieto lee:

"El conde había llegado a sus cincuenta años, edad cruel cuyo peso puede acaso sentir sólo un hombre perdidamente enamorado" (La Cartuja de Parma)

y piensa que todas las palabras que se dicen en el mundo a él estén dirigidas. Incapaz de responder a todos, se inquieta un poco más.

*****

Soy un animal inquieto que golpeará con su cabeza los barrotes. Será tanta la ira, como cosa de profetas, que la jaula se abrirá y el animal que soy gritará salvaje en la estepa como un león nietzscheano que abomina de todos los amos.


Desgarraré el lienzo de los cuadros.

Romperé la pantalla.

Comeré arena.

Escribiré los más tristes versos de todas las noches.


 Río Saja Si de la escritura restara   todas las mierdas de mi vida, la queja y la decepción frente al destino, el maldito yo en su aspect...