jueves, 26 de febrero de 2015

la inversión




 Yo decía hace bien poco:

maravilla o recuerdo de los viejos
tiempos de milagro y otros imposibles es,
quizás,
el río que fluye en su símbolo
y en su real devenir
del mar hacia la montaña

y, como sin querer, me encuentro que dicen:
"Al oeste está el río Orontes, al que los sirios llaman al-Asi, el río rebelde, porque a veces da la impresión de fluir en sentido contrario, desde el Mediterráneo hacia el interior"   (Amin Maalouf: Las Cruzadas. La Invasión)


El milagro se desvela rebeldía. No sé si luciferina revuelta frente al dios. Quizás la rebeldía es simple, sobre todo en estos tiempos de pérdida de significados por inflación e hipérbole.

El filósofo, apartando la vista del río, grita: ¡¡solo apariencia!! Un poco ridículo sí es, ya te digo.

No sé qué será de nosotros si nos quedamos sin imposibles y los ríos, rebeldes o mágicos, circulan del mar hacia la montaña.

1 comentario:

  1. ¿No somos todos ríos con corrientes en dos direcciones? ¿O es una única y la contraria es solo nuestro afán del recuerdo, la conciencia de no haber llegado lo suficiente a alguna parte, la resistencia a fluir hacia el final ineluctable? ¿Es la rebeldía un hecho traducible en algo palpable o será un sueño? ¿Es una construcción del ser o apenas un esfuerzo vano? ¿Modifica o entorpece nuevas fases de nuestra vida? El hombre rebelde es el que dice que NO, escribió Camus. ¿Un NO meramente negador o un NO para un SÍ que se pretende dialéctico y creador de etapas positivas en la vida? Tantas preguntas puede uno hacerse sobre la rebeldía y los rebeldes...Pero apariencia hay tanta y el calado se nos muestra tan líquido en nuestros días...

    No, yo tampoco sé qué será de nosotros, o sí: que seguiremos siendo por inercia, habitando por casualidad, resistiendo porque ya no sabemos hacer nada más.

    Un abrazo, y mucha alegría de leerte tras tanto tiempo, hermano.

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